Es algo que no se puede resistir
porque nadie puede resistir al Espíritu Santo. Es una búsqueda en el interior
de nuestra conciencia sobre quien soy yo delante de Dios y de los hombres; es un
grito esperanzado llamando y pidiendo a Dios por la Sabiduría que se sienta
junto a su trono; es una lucha en el interior de nuestro corazón hasta que
logremos vencer nuestras cuitas y entonces, aparece radiante la Sabiduría y nos muestra con su luz
el camino de la vida, de la ciencia y de la inteligencia, nos conduce por el
camino recto y nos allana el camino; con ella viene la salud, la vida y la
bendición; con ella vivimos la cercanía con Dios y nuestra fe se vuelve plena y
nuestro rostro resplandece para el testimonio de los ángeles y de los hombres.
Es por tanto, una experiencia única, personal e intransferible, solo la persona
que adquiere la Sabiduría puede decir como es la amistad y el amor de Dios.
La experiencia espiritual del
Movimiento SABEND se da en el interior de la persona, logrando una transfiguración de
su propia vida, y solo entonces podemos mirar al prójimo para ayudarlo con
autentica caridad a encontrar su propio camino de Sabiduría desde la Sagrada
Escritura. Así nuestra espiritualidad llena el espíritu humano y lo capacita
para transfigurar la familia, las relaciones
sociales, el trabajo, las instituciones… en definitiva, colaboramos con la
labor apostólica y misionera de Cristo.
Que el Espíritu de Sabiduría guie
prudentemente nuestro camino hasta alcanzar el conocimiento de la Voluntad de
nuestro Dios y Padre Celestial.
Dios los bendiga,
Eliécer Ramírez Sánchez
Movimiento de Sabiduría y Bendición
